Del mismo modo, los enfermos pueden ser visitados en los centros de atención especializada del área para patologías más leves en Dr. Barraquer, en Sant Adrià de Besòs,  Dr. Robert y Gran Sol, en Badalona, y del CAP Carrer Major, en Santa Coloma de Gramenet.
 

Es una de las enfermedades alérgicas más frecuentes: afecta casi a una cuarta parte de la población. Causa síntomas nasales, oculares, de la faringe y del oído. Las causas más frecuentes en Cataluña son la exposición ambiental a ácaros del polvo, a los pólenes de árboles y plantas, hongos y epitelios de animales domésticos, especialmente gatos y perros. A todos estos alérgenos estamos expuestos de forma habitual por vía respiratoria, pero solo en personas susceptibles, es decir, alérgicas, se produce esta sintomatología que puede aparecer a cualquier edad. Las molestias pueden manifestarse de manera inmediata al respirar aquello a lo que el paciente es alérgico, pero también de manera retardada: al cabo de unas horas de haberlo inhalado. Esto explica que muchas personas tengan las molestias de madrugada o por la mañana, no en el momento de respirar el alérgeno. La rinitis alérgica es un factor de riesgo para el desarrollo de asma bronquial, sinusitis u otitis serosa (cúmulo de mucosidad en el oído). Por eso es importante diagnosticarla pronto.

En el diagnóstico hay que aclarar si realmente se trata de este tipo de alergia o de otras formas de rinitis, por eso es imprescindible que lo realice un especialista en alergología y se colabore con el Servicio de Otorrinolaringología. El diagnóstico se realiza a partir de los síntomas y de las pruebas de alergia: pruebas cutáneas a neumoalérgenos, provocación conjuntival con alérgeno, peak-flow (medida de flujo) nasal inspiratorio y analítica in vitro (en el laboratorio

El asma es una enfermedad inflamatoria de las vías aéreas (bronquios). La principal causa es la alergia respiratoria: un 80% de los asmáticos son alérgicos. Pero hay otros factores que pueden causarlo: de tipo hereditario, ambiental, infeccioso o incluso nacimientos prematuros o tabaquismo pasivo desde la infancia. El asma puede iniciarse a cualquier edad de la vida, y cuando aparece antes de los tres años generalmente no se asocia a causa alérgica. El asma alérgica que aparece en la primera o segunda infancia y en la juventud acostumbra a ir acompañada de rinoconjuntivitis, antecedentes de eccema infantil o alergia alimentaria. Es una enfermedad condicionada por la inhalación de alérgenos y con tendencia a persistir durante mucho tiempo. Causa tos seca, generalmente en ataques y especialmente por la noche. Cuando esto pasa hablamos de broncoespasmo, porque los bronquios se cierran y no dejan pasar el aire. Puede ser leve o requerir atención médica urgente. A su vez, puede ser intermitente o habitual y persistente. Al diagnóstico se llega a partir de los síntomas, las pruebas de capacidad pulmonar (espirometría o peak flow) y las pruebas de alergia. Los alérgenos más frecuentes como causa de asma bronquial son los mismos que para la rinoconjuntivitis: los ácaros del polvo, los pólenes de los árboles y plantas, los hongos y los animales domésticos.

Para la correcta identificación de la causa, un médico especialista en alergología lleva a cabo un estudio que incluye: pruebas cutáneas a neumoalérgenos, pruebas de función respiratoria (espirometría simple y con prueba de broncodilatación) y valoración de la inflamación bronquial. Además, en colaboración con los servicios de Neumología y de Pediatría, se realizan pruebas de función pulmonar completas y test de provocación bronquial.

También se ha creado la Unidad de Asma Grave, donde colaboran alergólogos, neumólogos, pediatras, ORL e inmunólogos para ofrecer la mejor atención multidisciplinaria por aquellos pacientes con asma más compleja y menos controlada. La SEAIC (Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica) ha acreditado a esta unidad como unidad de excelencia y como unidad docente para impartir formación práctica presencial en asma grav

Los pacientes que han presentado una anafilaxis o cualquier otro tipo de reacción alérgica en el que se sospeche la implicación de un alimento tienen que ser valorados por un médico especialista en Alergología para identificar el alimento responsable y prevenir nuevos episodios. La forma de confirmar o descartar la implicación de alimentos sospechosos es mediante: pruebas cutáneas con los alimentos (prick-test), pruebas cutáneas con los alimentos en fresco (prick by prick test), pruebas epicutáneas con los alimentos (patch-test), pruebas de provocación o tolerancia a alimentos bajo supervisión hospitalaria y estudio analítico en el laboratori

Entre un 4 y un 8% de la población infantil sufre alergia alimentaria y los alimentos que la causan con más frecuencia son el huevo, la leche, los frutos secos, el pescado, el marisco, las legumbres y las frutas, por este orden, según la SEICAP (Sociedad Española de Alergia e Inmunología Clínica Pediátrica).

Las causadas por la leche y el huevo son las que originan más problemas por su presencia habitual en nuestra alimentación.

Hasta ahora, el único tratamiento aceptado de forma generalizada para evitar los síntomas de las alergias alimentarias es la dieta de eliminación.

La inmunoterapia oral (ITO) con alimentos se está instaurando en los últimos años como una alternativa al tratamiento convencional.

La ITO consiste en la administración de dosis crecientes del alimento implicado hasta lograr la dosis máxima tolerada o que represente la ración habitual para la edad (por ejemplo, 200 ml de leche de vaca o un huevo).

El objetivo básico de la ITO es evitar la reacción alérgica, especialmente la anafilaxia, después de la exposición al alimento que causa la alergia. Algunos pacientes consiguen la tolerancia o el área mantenida (“sustained unresponsiveness”), es decir, pueden tomar libremente el alimento sin necesidad de un consumo regular. Por el contrario, otros pacientes necesitan la toma regular del alimento para no presentar reacción, son los pacientes desensibilizados.

Este procedimiento lo llevamos a cabo en el Hospital de Día de Pediatría desde hace más de 5 años de forma asistencia

Los medicamentos pueden provocar efectos indeseados o adversos, una minoría de los cuales son causados por la alergia al fármaco. En este caso, la persona crea sensibilidad de tipo alérgico a la sustancia química del medicamento, de forma que cuando lo toma aparece una reacción. Las alergias en las que intervienen los anticuerpos Inmunoglobulina E (IgE) aparecen de forma inmediata a la toma del medicamento, normalmente con la primera o la segunda dosis, y pueden manifestarse con erupción cutánea pruriginosa con inflamación o también como anafilaxis, es decir, como reacción alérgica generalizada que puede poner en peligro la vida del paciente. Un ejemplo es la alergia a la penicilina. También hay otros tipos de alergias a medicamentos en las que no intervienen las IgE. Por ejemplo, algunas personas tienen alergias de tipo retardado de contacto, como por ejemplo los eccemas después de la aplicación de cremas. Los medicamentos más frecuentemente implicados como causantes de reacciones alérgicas son: antibióticos (penicilinas, cefalosporinas, quinolonas, macrólidos, sulfamidas); antiinflamatorios; contrastes yodados; quimioterápicos; anestésicos locales y generales; corticoides, y anticonvulsionantes.

Después de que el paciente haya sufrido una reacción adversa a un fármaco, su médico de cabecera lo derivará a un especialista en Alergología en caso de que considere necesario confirmar si ha intervenido un mecanismo alérgico y encontrar fármacos alternativos. Desde la Sección de Alergología se llevarán a cabo pruebas cutáneas (prick-test, epicutáneas e intradermorreacción), pruebas de exposición controlada a fármacos bajo supervisión médica hospitalaria, y estudio analítico en el laboratori

Las pruebas de tolerancia a medicamentos se llevan a cabo en el Hospital de Día Polivalente en el caso de adultos y en el Hospital de Día Pediátrico en la planta de Pediatría en el caso de niños. Allí, el paciente es monitorizado (se realiza el control de las constantes vitales) y se mantiene con una vía venosa permeable, para administrar la medicación de urgencia en caso de necesidad en los adultos. Estas pruebas se realizan durante 4-5 horas, donde se introduce el medicamento sospechoso o alternativo en dosis crecientes.

Es importante saber que la prueba diagnóstica no está exenta de riesgos. Sin embargo, también es cierto que las estrictas medidas de seguridad del centro hospitalario donde se lleva a cabo la prueba están perfectamente preparadas para atenuar los efectos, en caso de que haya una reacción alérgica. Estas reacciones, no obstante, son muy pocos frecuentes y, en general, leve

Desde la AEMPS se alienta a llevar a cabo una farmacovigilancia activa para la detección de reacciones adversas medicamentosas, entre las que están las reacciones alérgicas, y así derivar a los pacientes con sospecha de reacción alérgica para evaluación alergológica.

Para la detección activa de posibles reacciones adversas a la vacuna se ha puesto a disposición un cuestionario de detección precoz a la página web de nuestro hospital y en el caso de posibles reacciones sugestivas de alergia se ha creado un circuito rápido entre Medicina Preventiva y la Sección de Alergología para el estudio de estos casos liderado por la Dra. Padró.

Para el estudio de aquellos pacientes que presenten un riesgo alto antes de la primera dosis de la vacuna o que hayan presentado reacciones graves o sugestivas de ser IgE mediadas después de la administración de la primera dosis, se procederá a la valoración por parte de un alergólogo y a la realización de test cutáneos tanto con los adyuvantes de la vacuna a estudiar como con los adyuvantes de vacunas alternativas.

Una vez realizados los test cutáneos, se puede valorar la administración de la segunda dosis bajo observación y supervisión de un alergólogo, dado que este es el procedimiento “gold standard” en el diagnóstico de alergia a fármaco

La picadura de un insecto puede producir una reacción local con rojez, dolor, picor e inflamación más o menos importante. Si la persona picada es alérgica al veneno inoculado, puede presentar reacciones generalizadas. Esta respuesta llamada anafilaxis es la forma más grave de reacción alérgica y suele consistir en una combinación de síntomas: dificultad respiratoria, bajada de la tensión arterial, pérdida de conocimiento, inflamación de la garganta con dificultad respiratoria, picor e inflamación generalizados, urticaria, paro cardiorrespiratorio. La reacción suele aparecer pasados pocos minutos y pone en peligro la vida del paciente. La reacción anafiláctica grave suele presentarse en personas que ya han sido picadas previamente (60% de los casos). Es importante, pues, contactar con el médico de cabecera si se ha presentado una reacción alérgica a una picadura, puesto que las reacciones que se puedan presentar con picaduras posteriores (incluida la anafilaxis) pueden evitarse con tratamiento específico, que se administra en la Unidad de Inmunoterapia de la Secció

El látex es una proteína natural que se obtiene del árbol Hevea brasiliensis y que se utiliza ampliamente en la fabricación de productos de caucho. Algunas personas presentan hipersensibilidad a esta proteína. La mayoría de las veces, la hipersensibilidad se manifiesta de forma inmediata como urticaria de contacto, asma o rinoconjuntivitis. Cuando hay una exposición masiva, por ejemplo con material médico-quirúrgico durante la práctica de exploraciones médicas o de intervenciones quirúrgicas, el cuadro puede ser grave. Ante la sospecha de alergia a látex, se llevan a cabo test cutáneos (prick-test), test de exposición y un estudio en el laboratori

r/> La técnica ALEX (Allergy Explorer de Macroarray Diagnostic)La técnica Immuno Solid-phase Allergen Chip (ISAC) es una prueba de diagnóstico in vitro avanzada para la determinación simultánea de la presencia en la sangre de anticuerpos Inmunoglobulina E ante más de un centenar de proteínas alérgenas presentes en más de 50 fuentes de alérgenos: alimentos, inhalantes y venenos. Se trata de una técnica muy útil que ayuda a mejorar diagnósticos de las causas y a evitar errores terapéuticos en las vacunas alergénicas, así como a detectar sensibilizaciones no sospechadas, entre otro

r/>La Sección de Alergología dispone de una enfermera y de un médico especialistas para iniciar y controlar tratamientos con inmunoterapia sublingual, intradérmica o subcutánea.

La inmunoterapia o vacunación con alérgenos es el único tratamiento etiológico de procesos de causa alérgica como la rinitis, el asma, alergia a LTP (alimentos vegetales) y la alergia a venenos de himenópteros. Su eficacia ha quedado plenamente demostrada en múltiples estudios de doble ciego y metaanálisis. La inmunoterapia debe utilizarse exclusivamente en enfermedades a las que se demuestre que un mecanismo alérgico intervenido por la IgE es básico en su patogenia. La vacunación consiste en la administración de dosis progresivamente crecientes de un extracto alergénico ante el que el paciente está sensibilizado, con el fin de mejorar los síntomas asociados a la exposición posterior a este alérgeno.

La Unidad de Inmunoterapia consta de un espacio físico y personal específicamente formado, dedicados a la administración de las dosis de las vacunas de alergia y el seguimiento correcto de las pautas de vacunación.

En general, las dosis de las vacunas de alergia se toleran bien dada la buena calidad de los productos comerciales disponibles, siempre que se sigan las normas adecuadas para una administración correcta.

La administración de las dosis de vacunas realizadas en un centro con personal competente y con los recursos necesarios para tratar una posible reacción minimiza drásticamente el riesgo de una reacción grave. También se establece una relación enfermo-equipo sanitario más sólida y de confianza y existe la posibilidad de seguir pautas de administración más rápida

En nuestra Sección participamos de manera multidisciplinar con Dermatología en la Unidad de Urticaria Crónica, la Unidad de Dermatitis Atópica y en la Unidad de Toxicodermia. De este modo, los pacientes pueden beneficiarse de una visión integral de la enfermedad desde el punto de vista inmunológic

Desde el hospital realizamos interconsultas entre las plantas y de Urgencias. La mayoría de ellas se centran en la alergia a medicamentos. Se realizan test cutáneos (intradermorreacción y prick tests), tests de tolerancia o desensibilizaciones a medicamentos fundamentales si son necesarios. También evaluamos posibles reacciones adversas a medicamentos como pueden ser IgE mediadas o toxicodermias. Del mismo modo, aclaramos dudas sobre posibles alergias alimentarias.

 

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Muchos síntomas, una única enfermedad

Las mucosas de la nariz, de los ojos y de los bronquios tienen similitudes en su respuesta a los alérgenos en personas alérgicas, lo que se explica si se considera que la alergia respiratoria es una enfermedad inmunológica sistémica que se manifiesta en diferentes órganos.

Algunos datos: la rinitis alérgica (es decir, la reacción de las membranas de la mucosa de la nariz en forma de estornudos, secreción acuosa, congestión, lágrimas y picor en los ojos y la garganta) es como mínimo tres veces más frecuente que el asma, y diferentes estudios han demostrado que es un factor de riesgo importante para el desarrollo de la enfermedad asmática. El asma puede afectar al 20-50% de los pacientes con rinitis alérgica. Y la mayor parte de los pacientes asmáticos tienen rinitis (70-95%).

Estos hechos han puesto sobre la mesa, pues, el concepto de una vía respiratoria, una única enfermedad.

 

Los alérgenos

Es necesario conocer el o los posibles alérgenos responsables de la reacción inmunológica que desencadena la inflamación de la mucosa respiratoria y las manifestaciones clínicas a nivel nasal, bronquial u ocular. Los aeroalérgenos más presentes en nuestra zona son los ácaros del polvo doméstico (D. pteronyssinus, D. Farinae), los pólenes (gramíneas, olivo, plátano de sombra, ciprés y parietaria, entre otros), los epitelios (perro y gato, fundamentalmente) y los hongos (Alternaria, Cladosporium, Penicilium).

 

Diagnóstico

Para llegar al diagnóstico de la causa de las enfermedades alérgicas respiratorias disponemos de pruebas cutáneas, pruebas de laboratorio (determinación en una muestra de sangre de los anticuerpos denominados Inmunoglobulinas E) y pruebas de provocación (generar un contacto directo) en la mucosa nasal, conjuntival o bronquial.

Las pruebas cutáneas y las pruebas de laboratorio son las que permiten demostrar sensibilización al alérgeno, pero hay que tener en cuenta que el hecho de que sean positivas a un alérgeno no quiere decir necesariamente que aquel sea el responsable de las manifestaciones clínicas del paciente.

 

Tratamiento

Si se consigue identificar al alérgeno o alérgenos responsables de los síntomas, se puede tratar de forma integral la enfermedad mediante su evitación y mediante el uso, cuando es indicado, de inmunoterapia específica como tratamiento de las causas de la alergia respiratoria.

La inmunoterapia es un tratamiento eficaz y seguro avalado por un consenso internacional propiciado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), pero solo si se aplica de forma personalizada y si se sustenta en el diagnóstico de un alergólogo. De hecho, es el único tratamiento capaz de modificar el curso de la enfermedad.

 

En evolución

La alergología, como especialidad médica, está experimentando unos cambios muy importantes en los últimos años de manera paralela a los avances científicos de la biología molecular. Así, antes hablábamos de pacientes alérgicos al polvo del hogar, después a los ácaros del polvo, posteriormente a partículas fecales de los ácaros del polvo y, actualmente, en algunos casos se conoce exactamente qué molécula produce la reacción alérgica.

Hoy en día, gracias a la caracterización de los alérgenos a nivel molecular, se ha desarrollado el concepto del Diagnóstico Basado en Componentes, que se fundamenta en detectar en el laboratorio la presencia, en una muestra de sangre de los pacientes, de anticuerpo inmunoglobulina E específica para la proteína realmente responsable de la respuesta alérgica. En Germans Trias, gracias a la colaboración de la Unidad de Alergología con el Servicio de Inmunología, disponemos de esta nueva herramienta diagnóstica que, en casos determinados, nos permite conocer mejor el perfil de los pacientes y proporcionarles tratamientos más ajustados.

Documentos de interés para pacientes con alergias respiratorias:

• Información para pacientes con alergia a los ácaros
• Información para pacientes alérgicos a los hongos 
• Información para pacientes con alergia al polen de olivo
• Información para pacientes alérgicos al polen de la parietaria 
• Información para pacientes con alergia al epitelio de animales domésticos
• Información para pacientes con alergia al polen de gramíneas 
• Información para pacientes con alergia al polen de la artemisa
• Información para pacientes con alergia al polen del ciprés
• Información para pacientes con alergia al polen de abedul

  Alergia alimentaria

  alergia alimentaria es un importante problema de salud pública que afecta a niños y adultos y que ha aumentado en las últimas décadas en los países industrializados. La confirmación de su diagnóstico puede ser problemática, porque puede producir síntomas localizados o más generales, como por ejemplo la anafilaxis, que puede suponer un riesgo vital. La estrategia terapéutica es evitar el/los alimento/s que produce/n la alergia alimentaria y tratar los síntomas.

  Es tres veces más frecuente en niños que en adultos (8% y 2-3%, respectivamente). Los alimentos que más a menudo están implicados dependen de los hábitos alimentarios de la población y, por lo tanto, de la edad y del área geográfica. En nuestro medio, los más frecuentes hasta los 5 años son la leche, el huevo y el pescado. Después, las legumbres, las frutas, los frutos secos, el marisco y las especias.

  Especialmente en los niños, la alergia alimentaria puede ser la primera manifestación de enfermedad alérgica, y puede ir seguida o bien coexistir con otras patologías alérgicas en un proceso que denominamos “la marcha alérgica”. Los pacientes en quienes coexiste asma y alergia alimentaria tienen más riesgo de crisis graves de asma.

  Síntomas

  Las posibles manifestaciones clínicas son las siguientes:

  • Anafilaxis: reacción grave de inicio rápido y que puede llegar a ser mortal. Afecta, como mínimo, a dos órganos.
  • Anafilaxis inducida por ejercicio: se produce después de haber ingerido algunos alimentos que, sin hacer ejercicio, no producirían problema alguno. Es más frecuente en adolescentes.
  • Síndrome de alergia oral: Prurito en la cavidad oral y a veces inflamación de los labios. Normalmente por ingesta de alimentos de origen vegetal (frutas y hortalizas frescas) y marisco. Causa picor en boca, lengua, paladar, faringe y, ocasionalmente, edema (inflamación por acumulación de líquidos). Se asocia a menudo con alergia a pólenes.
  • Dermatitis atópica: inflamación y enrojecimiento de la piel que puede estar relacionada con alergia alimentaria, en especial en niños, en los que es moderada o grave.
  • Dermatitis alérgica de contacto: reacción retardada localizada en la zona de contacto con un alimento, en general en forma de eccema, enrojecimiento e irritación.
  • Urticaria de contacto.
  • Síntomas gastrointestinales retardados: incluyen vómitos, diarreas que pueden tener sangre o grasas, dolor abdominal o anemia, entre otros.

   

  Diagnóstico

  Cuando se sospecha de una alergia alimentaria, se lleva a cabo una entrevista con el paciente para conocer a fondo sus hábitos alimentarios y se le hace una exploración física. Después, se llevan a cabo:

  • Pruebas en el laboratorio con una muestra de sangre para determinar los anticuerpos Inmunoglobulinas E.
  • Pruebas cutáneas.
  • Pruebas de provocación, que consisten en generar contacto con el alimento que se sospecha que causa la alergia.

   

  Tratamiento

  Tras identificar el alimento responsable, el alergólogo recomienda evitar estrictamente el alimento e indica al paciente qué régimen tiene que seguir para eliminarlo. También le explica cómo reconocer los síntomas alérgicos que puede tener después de haber comido el alimento sin saberlo o de forma accidental, y qué medicación tiene que tomar en ese caso. El paciente deberá llevar siempre esta medicación encima.

   

  ITO (Inmunoterapia Oral)

  Los tratamientos de inducción de tolerancia oral, que pretenden llegar a la tolerancia total del alimento o, cómo mínimo, lograr aumentar el umbral de tolerancia en pacientes con alergias resistentes para que puedan seguir una dieta con las mínimas restricciones. Los estudios indican que estos tratamientos, que no están libres de riesgos y deben hacerse en centros especializados y con personal preparado, tienen porcentajes de éxito de cerca del 90%, En Germans Trias se realiza de manera asistencial en niños con alergias alimentarias graves persistentes al huevo y a las proteínas de leche de vaca.

   

  Nuevos tratamientos

  Además, en los últimos tiempos, y todavía de manera muy restringida, se empieza a utilizar tratamientos de inducción de tolerancia oral, que pretenden llegar a la tolerancia total del alimento o, como mínimo, lograr aumentar el umbral de tolerancia en pacientes con alergias resistentes para que puedan seguir una dieta con las mínimas restricciones. Los estudios indican que estos tratamientos, que no están libres de riesgos y deben hacerse en centros especializados y con personal preparado, tienen porcentajes de éxito de cerca del 90%, En Germans Trias se empiezan a llevar a cabo en casos seleccionados de niños con alergias alimentarias graves persistentes al huevo y las proteínas de leche de vac

  Alergia a medicamentos

  r/> La sospecha de alergia a medicamentos es una de las consultas más frecuentes a la especialidad de Alergología.

  Los medicamentos son capaces de provocar reacciones adversas de todo tipo, no solo alérgicas. Además, a menudo se asocia al fármaco la causa de síntomas muy diversos, que se pueden confundir con una reacción secundaria en lugar de una reacción IgE mediada.

  Las reacciones alérgicas a los medicamentos son reacciones impredecibles y pueden no estar exentas de riesgo vital. Cualquier medicamento puede ocasionar reacciones alérgicas.

  Entre los medicamentos que con más frecuencia causan reacciones alérgicas se encuentran los antibióticos, los fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), los contrastes yodados para radiología, los anticonvulsivantes, ciertos antihipertensivos, etc.

  Las manifestaciones clínicas que producen son variadas, pero en un 80% afecta de forma cutánea; las lesiones más frecuentes son la urticaria (ronchas) y angioedema (abultamiento de partes blandas) en reacciones inmediatas, o el exantema (rash) en reacciones retardadas. También pueden estar implicados otros órganos como el aparato respiratorio (asma o rinoconjuntivitis), el aparato digestivo (dolor abdominal, náuseas, etc.), hasta poder comprometer la vida (anafilaxis).

  En caso de reacciones IgE mediadas, la clínica suele aparecer en las primeras horas después de la toma del medicamento.

  Las pruebas de alergia a un medicamento determinado son aquellas que se llevan a cabo a los pacientes que presentan, en su historia clínica, evidencias de haber sufrido un proceso provocado por una reacción de hipersensibilidad a este medicamento o a alguno de sus componentes.

  En la actualidad, las pruebas más adecuadas para llegar a un diagnóstico correcto de alergia a medicamentos pueden ser in vitro (IgE específicas, Test de activación mastocitaria o test de transformación linfocitaria), test cutáneos (prick test e intradermorreacción) y test de tolerancia al medicamento o alternativo, o en casos donde se ha confirmado el diagnóstico de alergia pero el fármaco es imprescindible, un test de desensibilización a este.
   

  ¿Qué son las pruebas de tolerancia a medicamentos?

  Son un conjunto de pruebas con las que el médico confirma o descarta la alergia del paciente a un determinado fármaco o grupo de fármacos de una misma familia medicamentosa. Para llevar a cabo el estudio, hay que administrar dosis crecientes del medicamento implicado bajo control médico estricto, puesto que existe la posibilidad de que se puedan reproducir algunos de los síntomas atribuidos al medicamento. Este procedimiento lo realizamos en el Hospital de día Polivalente o de Pediatría o en las plantas hospitalarias.

  Todas estas pruebas se llevan a cabo siempre bajo estricta supervisión médica, con un control médico permanent

Contacte: alergia.germanstrias@gencat.cat